Consejos para docentes en el recreo: ¡Aprovecha al máximo el tiempo libre!

El receso escolar pertence a los instantes de la día didáctica que, por su particular condición, se considera inusual desde la perspectiva de la intención didáctica del centro. Para esto, la educación informal se vive —en un espacio formal— sobre los procesos de enseñanza-estudio. Luzuriaga (1995) quien cita a Velandia (2017) enseña que recién en las últimas décadas se comienza a conocer como un espacio mucho más de capacitación donde los pequeños y jóvenes se relacionan entre sí, para poner en práctica las reglas y patrones de convivencia aprendidos. fuerza. efectúan ocupaciones similares con este período temporal como juegos, expresiones anatómicos, hablas, llevar a cabo fila para obtener en tiendas y prácticas deportivas.

Para los alumnos, el tiempo de reposo es un instante de relajación, disfrute y exitación por el hecho de que es una ocasión para salir de la rutina de las clases, para dejar en libertad un sentimiento. Es esa independencia la que les deja expresar su accionar de forma espontánea y real, tal y como si estuviesen en sus espacios de cotidianeidad (Chávez, 2013). Aprueban o desaprueban estas formas de proceder y las llevan al contexto popular, donde si fueron positivas se reafirman y si fueron negativas o desaprobadas existe la posibilidad de reconsiderarlas. Este es el avance reflexivo del sujeto que participa en el receso escolar. Según Locke (1690), para entender hay que vivir la experiencia; De esta afirmación se comprende que las vivencias forman una parte del día a día de la escuela y que los estudiantes evitan efectuar ciertas ocupaciones por las vivencias en el patio de recreo.

Adversidades socioeficaces.

Trabajar con pequeños socialmente rechazados, que tienen adversidades con sus compañeros:

• Ofrecer orientación particular enseñando de qué manera tienen que confrontar a el resto física y psicológicamente. Estos pequeños con frecuencia no reconocen las señales sociales que rigen el juego y la interacción con sus compañeros. Les resulta bien difícil admitir los sentimientos del resto y los instantes correctos para enseñar cada accionar. De ahí que tienen la posibilidad de ser bruscos y parecer indiferentes a las pretensiones del resto. Pruebe juegos, como el juego de expresiones faciales que detallan conmuevas. Se les puede soliciar que trabajen en parejas o en conjuntos midiendo las expresiones usadas por un lado. Esto puede asistir al niño a admitir la furia, el mal, la tristeza, por ejemplo señales sociales mostradas por sus compañeros (Marzano, 2003).

Un nuevo deber entre enseñantes y estudiantes

El recreo es el primordial espacio donde los pequeños son los responsables de sus relaciones, pero esto no quiere decir que los enseñantes no logren hallar la forma de formar parte ser recibido sin entorpecer la convivencia entre iguales.

El paso inicial es dejar de comprender el recreo como un premio y comenzar a verlo como una ocasión para democratizar la educación, administrando espacios donde los estudiantes logren interaccionar entre sí y con los instructores de una manera relajada y entretenida. forma. atmósfera.

Si quieres ver otros artículos similares a Consejos para docentes en el recreo: ¡Aprovecha al máximo el tiempo libre! puedes visitar la categoría Educación o revisar los siguientes artículos